LA BUENA CAUSA - MI VISIÓN MUY PERSONAL

No es casualidad que esta miel, la representación de las escuelas, y la búsqueda de oro en la Isla del Sur me fue dada por el universo... Nueva Zelanda no es casualidad, sino destino... Más aún después de todas las correcciones (instrucciones del universo) que me han traído hasta aquí... De ahí que dedique la segunda mitad de mi vida a mi realización de «aportar algo bueno»: Aportar energía positiva a la conciencia colectiva en constante crecimiento, ser compasivo y atento, y mantener siempre la curiosidad.

No pretendo cambiar el mundo. Sin embargo, si cada uno de nosotros transmite la idea de «hacer algo bueno» a otras 100 personas en nuestra vida -aunque sólo sea una sonrisa en el autobús- y luego estas 100 personas a su vez lo transmiten y lo viven, y así sucesivamente, entonces nos acercaremos más a la plenitud y al amor y habremos cambiado el mundo.

Quiero que mi miel de Manuka haga el bien, tanto para la salud como para el mundo. Parte de los beneficios se destinan a la organización mundial contra el plástico en los océanos OCEAN MATERIAL. También hago donaciones periódicas a organizaciones sociales y apoyo a un apicultor de Dachau que inventó la «bola de abejas». De este modo, las abejas de Nueva Zelanda también ayudan a las de Europa. Si desea más información, póngase en contacto conmigo en jonas.iwaly123@gmail.com.

Mis mejores deseos, salud y disfrute,
Stefan Jonas

MI MIEL «PERSONAL
En 2016, después de seis semanas de viaje con mi hija Lara y su pareja Matt (que ahora viven en Wellington y me convirtieron en un orgulloso abuelo el día de San Valentín de este año), continué mi viaje solo durante otra semana en mi primer viaje a Nueva Zelanda. Mis viajes me llevaron a Coromandel, una pintoresca península y popular escapada de fin de semana para los habitantes de Auckland, a poco más de dos horas.

Conduciendo por una carretera de grava etiquetada como 309, un cartel proclamaba: «Miel». Pensando que la miel sería un buen recuerdo para mi regreso a Alemania, seguí un estrecho camino de tierra a través de un pequeño río hasta llegar a una encantadora granja con verdes prados, altos helechos plateados y cientos de colmenas. Allí conocí a una apicultora que acababa de revisar los panales. Me recibió calurosamente y charlamos durante media hora sobre la vida, como es habitual en Nueva Zelanda incluso entre desconocidos.

VISIÓN Y PHILOSOPHÍA

Luego me condujo a una pequeña cabaña de madera, una «choza de la honradez» donde dejas dinero por tus compras. En el interior, los tarros de miel con el número 100 en la tapa estaban apilados en los estantes, cada uno a un precio de 25 dólares. Me sorprendió el precio, equivalente a unos 15 euros, pero me pareció descortés irme sin comprar nada. Así que compré a regañadientes cuatro tarros con mis últimos 100 dólares, me despedí amistosamente y seguí mi camino.

Menos de diez días después, de vuelta en Alemania, me dirigí a Stuttgart para celebrar el 18 cumpleaños de mi segunda hija en casa de mi ex mujer. Cuando le entregué a mi ex mujer uno de los tarros de miel, exclamó: «¡No puede ser! ¿Has traído MIEL DE MANUKA?». Me quedé perplejo y le pregunté: «¿Y qué?».

Ese día, mi ex mujer me habló de la eficacia única, las diversas aplicaciones y el alto valor de la miel de Manuka. Nos reímos e investigamos un poco en Internet, descubriendo que la miel exacta de los mismos apicultores, «309 Honey», se vendía en Amazon ¡a 56 euros el tarro de 500 gramos! Pensé: «Si hubiera comprado 40 tarros, el vuelo habría merecido la pena», y me sentí un poco frustrada porque alguien ya había importado «mi» miel a Alemania.

Desde entonces, he tenido la suerte de volver a Nueva Zelanda cinco veces más. Sue y Andrew, los simpáticos apicultores de 309 Honey, se han convertido en amigos y en una de mis paradas favoritas en mis viajes. Incluso cuando no tenía tiempo para hacer el viaje de ocho horas de Wellington a Coromandel, me enviaban un paquete para mantener mi suministro de miel.

En abril, visité la «granja 309» con mi actual pareja y nuestra maravillosa hija de tres años. Mientras cerraban el maletero lleno, pregunté casualmente si seguían trabajando con su importador a Alemania. Cuando me dijeron que no, me sorprendí. Me explicaron que la colaboración había terminado y que aún no habían encontrado un nuevo socio comercial. Al darme cuenta de que era un regalo de la providencia, respondí: «¡Me habéis alegrado el día! Dame unos meses y traeré 309 Honey a Europa».

Y aquí estamos. Gracias, universo.
Con amor y satisfacción, Jonas

P.D.: Para alguien que nunca se había ocupado de las normativas de transporte, aduanas y alimentación, logística de recogida y envío, etiquetado, etc., importar a Alemania y distribuir miel de Manuka fue un poco complicado. Sin embargo, como este regalo me lo dio el universo (el destino, Dios, Buda, etc.), me parece fácil y acertado hacer realidad esta visión. En las últimas semanas he conocido a muchas personas que nunca habría conocido, que adoran esta Miel 309 y experimentan sus efectos beneficiosos tanto como yo, y que me han ayudado y ahora se han comprometido a promocionar y recomendar la «Miel 309» y, por tanto, a hacer el bien. Desde que tuve la inspiración de utilizar los beneficios para apoyar a los empresarios que producen plástico a partir del cáñamo, todo fluye aún más suavemente. Una buena señal para estar en el buen camino. Y 'todo lo que viene fácil' hay que perseguirlo.

Ya se han dado los primeros pasos para contrarrestar la avalancha de plástico. Sue y Andrew han accedido a surtir mis pedidos en tarro de cáñamo

LA BUENA CAUSA - LA PERSONALÍSIMA VISIÓN DE JONAS

Siento que esta miel me fue dada por el universo, la representación de las escuelas y la búsqueda de oro en la Isla del Sur... Nueva Zelanda no es casualidad, sino destino... Más aún después de todas las correcciones (instrucciones del universo) que me han traído hasta aquí... Dedico pues la segunda mitad de mi vida a mi realización de «aportar algo bueno». Aportando energía positiva a la conciencia colectiva en constante crecimiento, siendo compasivo y atento, y manteniendo siempre la curiosidad.

No pretendo cambiar el mundo. Pero si cada uno de nosotros transmite la idea de «hacer algo bueno» a tal vez 100 personas en nuestra vida -aunque sólo sea una sonrisa en el tranvía- y luego estas 100 personas a su vez lo transmiten y lo viven, y así sucesivamente, entonces nos acercaremos a nuestra plenitud y amor y habremos cambiado el mundo...».

Otra parte de mi visión es ampliar mis lecturas. ¿Qué hay mejor que leer y ser escuchado? Que nos lean también nos retrotrae a nuestra infancia, cuando nuestros padres se sentaban junto a nuestra cama y nos acompañaban a dormir. Lo recuerdo muy bien con mis dos primeras hijas, una a mi derecha, la otra a mi izquierda, tumbadas en el sofá durante horas, leyendo metros y metros de literatura infantil y juvenil. Leer en voz alta es atención -afecto- y seguridad.

Esto podría desembocar en la visión de OMEGA (lugar de unión, realización, comunidad y llegada) Una granja/comunidad de vida para unas 20-40 personas, vida intergeneracional, un lugar de encuentro, un centro para métodos curativos alternativos de yoga, Lomi-Lomi, cuencos tibetanos, terapia matricial y de regresión, así como una biblioteca, sala de billar, restaurante y cocina (cocinar juntos también es una forma de relajación). Casas adicionales hechas con materiales de construcción sostenibles, como el cáñamo, para unas 20 habitaciones de huéspedes, así como parcelas para campistas y tiendas de campaña. Un mercado mensual para los agricultores de los alrededores, una guardería y un salón de actos para unas 7-800 personas, para conciertos de música, lecturas, representaciones teatrales, - pero sobre todo para seminarios que fomenten la conciencia colectiva.

ESCUELA Y BACHILLERATO NZ

Dos de mis hijas ya han ido al Western Springs College de Auckland y han terminado el Bachillerato Internacional. Es una alegría ver cómo florecen los jóvenes en este hermoso país con su sistema escolar individualizado, qué y cómo aprenden y cómo amplían sus horizontes en la vida. No puedo sino recomendarle que dé a su hijo esta expansión única para toda la vida.

Por lo tanto, estoy muy contenta de compartir mi experiencia y ahora represento a Western Springs College, Auckland y también a Wellington High School, de forma privada. Estoy encantada de responder a cualquier pregunta sobre el sistema escolar, la vida y la mentalidad amistosa en Nueva Zelanda y asesorarle en todo, desde la inscripción hasta la llegada. Además de la escuela y los padres anfitriones, también estoy disponible como persona de contacto durante la duración del viaje, e incluso mi primera hija está disponible in situ. Además, gracias a mi colocación directa, le ahorro costes considerables.

El momento ideal es después del 10º curso, independientemente de si es en la escuela secundaria o en el instituto. Ya sea durante unos meses, un año o incluso durante un año y medio para completar el Abitur internacional NCEA, reconocido para los estudios universitarios en Alemania. Si desea hacer a su hijo este regalo en la vida, o si conoce a alguien que conozca a alguien... Estaré encantada de compartir mi entusiasmo y transmitir mi experiencia.

Western Springs College, Wellington High School, Wellington Girl's College, Nga Tawa Diocesan School